Hoy es el día del gran debate.

Y en honor a la verdad, a mi, como a muchos de vosotros seguro que os pasa, me importa un bledo.

Solo pueden salir cosas malas de ahí. No me refiero solo al gasto que supone el debate, que es algo incomprensible si tenemos en cuenta que A) a los dos les viene de puta madre que hagan todavía más énfasis en que son los dos únicos candidatos posibles y B) es un programa que consiste en dos tíos sentados a los lados de una mesa tirándose heces cual monos el uno al otro. No veo en que se necesitan 540.000 euros, pero bueno. A lo que voy con las "cosas malas" es a que un debate con Rubalcaba y Rajoy solo puede terminar de dos formas, o Rajoy sale "vencedor" y consagra su mayoría absoluta (malo) o Rubalcaba se orina en la boca de Rajoy, dialecticamente hablando, porque "da gusto oírle" y eso, y gana, con lo que el PSOE vuelve al partido y a optar a gobernar otros 4 años (que es casi peor, porque ganarían por mayoría simple, tendrían que pactar con un montón de idiotas y seguiríamos cuatro caños con el mismo numero cómico con el que llevamos ocho).

Así que me importa un bledo quien gane, solo lo vería si lo de tirarse mierda en plan monesco fuese algo literal y no metafórico, con los dos candidatos brincando, chillando y cagándose en la mano y todo eso. Eso sería un debate que merecería la pena ver. O si terminasen a puñetazos, rollo parlamento Japones, un debate a lo "club de la lucha" sería digno de ver.

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