¿Visteis esta semana el vídeo de la chica andando por NY y la gente diciéndole cosas? Bueno, a algún lumbreras, a algún PUTO GENIO de YouTube, le ha dado por hacer otro vídeo en respuesta. Este:



¿Cual es el objetivo de este vídeo? ¿Dos negativos hacen un positivo? ¿Demostrar que las tías se quejan de vicio?

Desde mi punto de vista, precisamente lo que evidencia este vídeo es el mayor problema que tenía el otro. La reacción masculina. El problema del machismo a pequeña escala, el que se hace sin mala intención, es que nos parece "normal". Que somos incapaces de entender que es lo que está intrínsecamente jodido en ese comportamiento. La falta de empatía del hombre occidental del S.XXI, ese que cree que con darles acceso a puestos de trabajo y sufragio universal el problema ya está solucionado, es uno de los mayores impedimentos a la hora de intentar alcanzar la igualdad total entre hombres y mujeres.

El termino "feminazi" ha hecho mucho daño y nos ha conducido al pensamiento paranoico de que las mujeres no quieren igualdad si no que quieren "estar por encima de nosotros", obviando actitudes básicas y situaciones que siguen ocurriendo constantemente. Para mi este vídeo no prueba nada, como mucho (como alguien ha señalado en la sección de comentarios) la veracidad del anterior vídeo se ha reforzado. El mensaje de este vídeo es (para mi) si es que tiene alguno, que una vez más, en la misma situación, para las mujeres es peor. Ninguna chica, ni ningún gay del vídeo, se sienten ofendidos ante la impasividad del tipo. Nadie empieza a llamarle "flipado" o "puta". Nadie le sigue durante quince minutos. Es decir, lo mismo que pasa en los estudios, en el trabajo, con el sueldo, o con la vida así en general.

Ser incapaces de entener la hostilidad intrínseca del sistema hacia las mujeres es un problema terrible y los hombres deberíamos comprometernos a acabar con él. Con sufragio universal no basta. Ojo, que digo esto y no quiero que suene a que estoy victimizando a las mujeres, no quiero que suene a "las tías necesitan nuestra ayuda porque son débiles y nosotros no". Más bien al revés, si te pones a pensar cinco minutos en lo hostil que es el mundo en relación a las mujeres, dejas de entender como es posible que tantos miles y miles de chicas se levanten cada mañana con la energía suficiente para estudiar carreras, buscar trabajo o crecer en sus empresas. Empiezas a admirar a todas aquellas chicas de tu vida que no tienen miedo al mundo y siguen luchando por lo que creen.

No hay igualdad. Estamos lejísimos de vivir en un mundo igualitario. Y no ser capaces de ver o entender cual es el problema no ayuda.