"Still working on it, Cool Craig?"
" Okay, I know you're thinking, "What is this? Kid spends a few days in the hospital and all his problems are cured?" But I'm not. I know I'm not. I can tell this is just the beginning. I still need to face my homework, my school, my friends. My dad. But the difference between today and last Saturday is that for the first time in a while, I can look forward to the things I want to do in my life. Bike, eat, drink, talk. Ride the subway, read, read maps. Make maps, make art. Finish the Gates application. Tell my dad not to stress about it. Hug my mom. Kiss my little sister. Kiss my dad. Make out with Noelle. Make out with her more. Take her on a picnic. See a movie with her. See a movie with Aaron. Heck, see a movie with Nia. Have a party. Tell people my story. Volunteer at 3 North. Help people like Bobby. Like Muqtada. Like me. Draw more. Draw a person. Draw a naked person. Draw Noelle naked. Run, travel, swim, skip. Yeah, I know it's lame, but, whatever. Skip anyway. Breathe... Live. "

Ayer era muy tarde para poner nada, aunque tampoco se si necesito añadir nada más. Ayer vi una película muy buena, una de esas películas que te alegran el día cuando has tenido un día de mierda, de esas películas que acabas con una sonrisa. Me gustan las películas así. Me gustan los finales felices, sobre todo cuando merecen ser finales felices. Quiero decir... después de ver esa película, "It's kind of a funny story" (en castellano "Una historia algo graciosa") me puse otra, "The art of getting by", y era una de esas películas en las que el final es forzosamente feliz y termina produciendote el efecto contrario. Porque no quieres que el prota se quede con la chica, porque la chica es una zorra y el un pagafantas y ninguna zorra merece acabar con su pagafantas, ellos merecen algo mejor y ellas algo peor. Así que cuando terminó la siguiente película no estaba con una sonrisa si no que estaba pensando en que, bueno, sí, había estado bien, pero otro final la hubiese hecho mil veces mejor. ¿Habéis visto "500 days of summer"? Al final el protagonista no termina con Summer. Porque Summer es una zorra. Sin embargo al final conoce a otra chica. Hay esperanza.

A veces los amores de película son una putada más que algo bonito.

Pero bueno, creo que me estoy desviando del tema. Volvamos a la primera película, a la buena, a "It's kind of a funny story". No voy a hablaros de la película, no se trata de hacer una crítica. Es buena. Vedla. Punto. Ahora bien, uno de los motivos por los que me pareció tan buena es porque trata un tema por el que yo he pasado recientemente. El protagonista de la cinta, un adolescente depresivo, se encuentra una mañana teniendo pensamientos suicidas. Antes de hacer nada (y imagino que asustado por ello) decide ir al hospital más cercano a pedir ayuda y termina internado en la unidad de psiquiatria cinco días. Pero eso no es de lo que va la película, eso son las circunstancias, la película va de otra cosa. Va de la tristeza y de ser feliz con las cosas pequeñas de la vida porque son las mejores. A veces estás tan cerca del problema que no eres capaz de ver lo que tienes delante, y esos son los peores momentos. Lo sé porque lo he vivido. Este blog de hecho nació en esa etapa oscura de odio, rabia y dolor en la que vivía el último año y medio (tal vez algo más) que pasé en Madrid. Un circulo vicioso de infelicidad del que no pude empezar a salir hasta hace poco, hasta Junio de este año más o menos, y no sin que me costase bastes cosas.

Pero no se trata de hablar de mi caso particular, o de lo que le pasa al protagonista de la película, se trata de que vivimos en un mundo en el que la gente que vive en occidente en las grandes ciudades, esa que en teoria lo tiene todo, es incapaz de ser feliz. Osea, sí hay gente feliz en el mundo, está claro que los hay, pero hay un porcentaje alarmantemente alto de gente infeliz. Y deberíamos estar preguntandonos por qué pasa eso, por qué esa sensación se extiende. Porque la infelicidad es cómo un cancer, empieza siendo una tontería, unos meses "que tienes tontos y no tienes ganas de nada" y para cuando te das cuenta de que tienes un problema es una montaña de mierda insalvable. Así funciona la tristeza. Es cómo un puto tumor que crece en tu garganta hasta que te asfixia.

Creo que gran parte de esa tristeza viene por culpa de las expectativas. Está claro que hay que tener expectativas de futuro, que hay que aspirar a tener una vida mejor si se puede, pero también hay que asumir que a veces las cosas no van como debemos, o mejor dicho, que a veces las cosas no deben ir cómo deben ir. Hemos creado un sistema en el que hay un camino marcado, claro que está lleno de opciones, pero no deja de ser un camino asfaltado y lleno de señales, peajes y semaforos. Un sistema en el que la vida está "predeterminada" (a medias, no seamos ingenuos) desde que uno nace. Y nos olvidamos de que por mucho que nos parezcamos, somos 7 mil millones de personas en el planeta, 7 mil millones de individuos que piensan, actuan y viven libremente. No puedes limitarlo todo a un modo de hacer las cosas. Deberíamos ser nosotros los que construyesemos el camino, no solo limitarnos a recorrerlo.

Creo que es fruto de esa sensación de que en realidad tu solo estás recorriendo el camino marcado y de convivr con toda la presión que supone vivir con respecto a las expectativas de ese camino, de donde surge gran parte de la tristeza de este mundo.

En mi caso particular fue algo diferente, supongo que en todos los casos particulares lo son, pero eso es otra historia.



Algún día igual me animo a contarla, o más bien lo que hizo que todo cambiara, que creo que en el fondo es la parte más importante de todo aquello.


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